LIMOSNA A LA CARTA
-Gracias, señora, gracias...
Era lo que siempre me decía la mujer mayor que pedía limosna junto a la entrada del supermercado. Tal como solía hacer puse una moneda en su mano y estuve a punto de entrar cuando me agarró del brazo.
-Cómprame queso, señora, para los niños...
Asentí algo sorprendida y me fui adentro. Hice mi compra y añadi un blíster de queso semicurado de cierta calidad que a la salida entregué a la abuela.
-Gracias, señora, gracias...
Unos días después la volví a encontrar. Su mirada fue más fría que de costumbre.
-Queso no bueno. Niños no querer. Cómprame huevos, muchos huevos. Tortilla para niños.
Le di dos euros y cambié de supermercado. Creo que me salió más barato de esta manera.
Seguramente te sale mejor. Yo les compro algo, pero no dejo que me digan el qué.
ResponderEliminarLa mendicidad debería abolirse, pero cuando hay política social que garantice la supervivencia. Un abrazo
Un tema complicado, de hecho la mayoría no quieren comida y piden dinero, me contaban que luego entran al super a devolver las galletas o el aceite por dinero. No se si es cierto. Ya se que era humor y yo me he ido a la parra. Abrazucos risueños
ResponderEliminarJaja seguro que si! Hay ciertas actitudes que, lamentablemente, quitan las ganas de colaborar. Un abrazo
ResponderEliminarEn el "super" donde suelo comprar, se cambian cada una o dos semanas.
ResponderEliminarEllas y ellos son rumanos, y no es que luego ellos lo devuelvan y pidan el dinero, es que lo conseguido lo almacenan para después venderlo a un precio más bajo.
Besos.
Y encima con pretensiones en lugar de estar agradecida la pedigüeña. Hay cada descarado en el reino del Señor... Buena medida la de cambiar de Supermercado.
ResponderEliminarBesos y gracias por habernos anfitrionado, Doro.
Jaaaa..desde luego ha estado genial la entrada .
ResponderEliminarEs cierto lo que cuentas , a veces no todas las personas que se ponen a pedir limosna al lado de los supermercados son más exigentes que nosotros mismos a la hora de comprar los productos ..
Es un tema que no creas tiene su miga .
Un besote y gracias por la convocatoria .
Vaya con la buena señora! Como se dice por aquí "encima de pobre, delicada" :)
ResponderEliminarBss.
Desde luego... ¡tiene tela!
ResponderEliminarPuedo decirte que no me sorprende tu historia en el sentido de que es tan cierta como la vida misma. Lo triste de todo es la mafia que puede haber detrás, pero en fin, dicen que a caballo regalado no le mires el dentado. Una pena, la verdad, pero sí, mejor cambiar porque total, encima de hacer un favor, te descaran.
ResponderEliminarUn beso enorme y mil gracias por la convocatoria. Nos leemos.
Mira yo si algún niño me pide un helado, se lo compro, pero pienso que dandoles una moneda e incluso comida no los ayudo. Besos.
ResponderEliminarNo, pues sí. Qué barbaridad. La última vez que me pidieron algo así le compré yogures y la verdad es que me lo agradecieron, pero compré porque los ojos de quien me lo pidió me parecieron sinceros.
ResponderEliminarBesos Doro y gracias por tu convocatoria.
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