Lazos de acá, raíces de allá, en medio el intento de fijar con palabras, pinturas y arcilla, impresiones y momentos para recordar y compartir.
viernes, 8 de enero de 2016
SE COGEN PUNTOS
LA ZURCIDORA DE MEDIAS
Hubo un tiempo en el cual un determinado cosquilleo en la pierna iniciado en la rodilla o la corva te helaba la sangre y corrías a controlar la integridad del precioso tejido de tus medias... ¡Una carrera! Veloz como el paso del tiempo se extendía para arriba, hacia abajo, siempre por donde más se veía y más afeaba ese tenue brillo uniforme de tu mejor -y normalmente único- par de medias de nailon. A veces el desastre podía frenarse con un toque de esmalte de uñas pero ese remedio de urgencia no le hacía ninguna gracia a la zurcidora de medias que solía anunciarse con un cartelito en alguna que otra mercería: "SE COGEN PUNTOS". Por unas pesetas, ella sabía recomponer con finas agujas curvas ese tesoro que eran las medias antes de inventarse los pantys baratos...
Y hubo chicas que por aparentar llevar medias sin poder comprarlas se pintaban sobre la piel de las piernas con lápiz de ceja la costura vertical de atrás. Claro que entre el sudor del baile y algún aguacero imprevisto solo una rápida carrera, de esas de poner pies en polvareda, te salvaba del ridículo por darse cuenta los demás de tu engaño. ¡Qué tiempos aquellos!
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Yo lo recuerdo, he llevado medias a coger puntos, de eso hace mil años o más. Saltibrincos
ResponderEliminarRecuerdo esos anuncios y, claro, esa forma de ganarse la vida. Ha sido otra profesión que esos productos más cómodos han relegado.
ResponderEliminarAgradable relato. Besos.
¡¡¡Síííííííííííí!!!, se me había olvidado. me ha gustado reencontrarme con este trabajo que parece una broma el que existiera.
ResponderEliminarHe compartido con mi esposo un momento de risas al imaginar esa raya de lápiz de cejas tras la pierna...obvio que eso de cruzar sexys las piernas no se podía hacer o se borraba el asunto jejeje...que cosas tan curiosas he leído esta semana...besosss
ResponderEliminar¡Ostras! De esto sí me acuerdo. Es más, mi madre le cogía los puntos de las medias a mi abuela... Y recuerdo que había mercerías que también los cogían.
ResponderEliminarNada más ver tu imagen, me ha venido la de mi madre al sol con aquel ganchillito metálico tan fino para estas labores.
Un beso enorme.
Vagamente recuerdo en mi niñez haber llevado medias de mi madre a que se las surcieran. Quiero recordar que las tensaban sobre un bastidor de madera o también una especie de huevo de madera pulida ¿Puede ser?.
ResponderEliminarUn abrazo.
Yo no recuerdo haber conocido ese oficio. Es el reflejo de una sociedad en la que las cosas se arreglaban en vez de tirarlas y comprarte otras.
ResponderEliminarUn saludo.
Sí, yo si recuerdo haber visto esos cartelitos en algunas mercerías. Afortunadamente es algo que hoy en día no hace falta. Qué pena tener que recurrir al truco de pintarse la raya en las piernas...
ResponderEliminarun beso
Mi madre tenia una merceria en Membrilla - La Mancha y cogia los puntos de las medias, estiraba la media en una especie de vaso y yo observaba la magia con que hacia correr aquel artilugio del que hoy no recuerdo el nombre. Tambien forraba botones. Gracias por recordar un oficio hoy olvidado, ha sido como un pequeño homenaje a mi madre. Besos.
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