jueves, 2 de mayo de 2019

PRIMAVERA ERÓTICA: ENTRE FRUTAS





ENTRE FRUTAS




-¿ Al mercado ? ¿ A estas horas?
Miré a la anfitriona que al abrirme la puerta me estaba entregando una lista y un billete de 50 €.
- Sí, guapa, es un mercado nocturno que han abierto aquí al lado. Cierran a las 12 de la noche. Oye, me ha fallado un compañero de la oficina, el mismo que iba a traer la fruta para el postre. Si hay un frutero guapo, tráetelo también.

En el mercado - iluminado por bombillas y guirnaldas - había unos cuantos puestos con frutas brillantes, multicolor, verduras frescas y mojadas de cuyas hojas goteaba agua; había manzanas como la fruta envenenada de Blancanieves, cerezas rojas como los labios de una princesa y sonrosados melocotones de terciopelo que hacían pensar en las mejillas de una geisha.

-¿Qué quieres? - preguntó una voz de hombre.

Unas finas manos morenas se habían interpuesto entre los limones que desde su caja lanzaban rayos de sol y mi campo de visión.

-Dos mangos, un melón galia...

Su dedo índice me decía que no, que no comprara los mangos ni los melones que había a derecha e izquierda de los limones.

-Mejor unas peras, son grandes y hermosas, -dijo sin mirar a las peras de verdad que por cierto también eran redondas y de buen tamaño, sin macas ni manchas.

-Vale, luego quiero plátanos, unos cuatro.

Otra vez meneaba las manos con un gesto despectivo.

-Mejor bananas, son más grandes y hermosas...

Me encogí de hombros y le miré a la cara descubriendo un fino perfil de azabache marcado por la tristeza, una boca sensual que apenas sonreía, poco pelo y menos barba.

Así me hizo comprar la mejor fruta, esa que él consideraba "grande y hermosa",  llenando dos bolsas de las que sobresalían espárragos y zanahorias, y también algún pepino. Metimos ciruelas y dátiles, y unas uvas de las de antes, grandes y hermosas, y con pepitas.

Pagué y me trajo la vuelta. Luego cogió las bolsas y levantó las cejas.

-¿A dónde? Pesa mucho para ti; yo lo llevo.

Anduve delante de él, sintiendo su mirada como un roce físico mientras una risa loca me subía por la garganta. Llegamos a la casa de mi amiga que nos abrió y primero miró desconcertada. Luego se sonrió y nos hizo pasar.

El frutero pidió una cesta plana que ella sacó del trasterillo, y yo lavaba las piezas mientras él montaba un collage de fruta algo subido de tono.

No sé qué cenamos, pero nunca olvidaré el sabor de la fruta, ni sus manos al desvestirla de sus cáscaras y pieles. Nos fuimos juntos y desde entonces nos hemos vuelto a encontrar infinidad de veces.


11 comentarios:

  1. Nos has dado un relato muy sugerente donde las palabras y la forma de escribirlas salta la imaginación ..una erótica compra con dependiente incluido ..
    Un abrazo y feliz noche ...

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  2. No imaginaba que la fruta pudiera ser tan sensual....y es que con esa forma que la describes. Muy bueno, besos.

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  3. Mañana iré a comprar fruta, como el dependiente no insista en venderme fruta "grande y hermosa" cambiaré de puesto hasta encontrar no solo al que sugiere y además te lleva la fruta a casa, ¡Voy preparando la cesta! Un abrazo preciosa y un aplauso para tu relato

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  4. Jeje muy sugerente tu relato frutal, hay tecnicas de seduccion mas que originales! Un abrazo

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  5. Madremía.... lo que da de sí un conjunto de frutas, nunca lo hubiera pensado.

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  6. jeje me gusta ese juego de las frutas, a demás todo detalle lo vuelve particular y creíble.
    un histeriqueo hermoso para la primavera

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  7. La fruta de la pasión, en manos del frutero, quien sigue a la clienta, demasiado solícito. Un final feliz, de primavera y fruta

    Un abrazo y feliz viernes

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  8. Qué maravilla! Creo que a partir de ahora miraré la fruta de otra manera 😁
    Muy buen relato, querida amiga. Un exquisito y sensual racimo de frutas que nos ha hecho florecer los sentidos.

    Abrazos, y muy feliz finde! 😘

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  9. Originaly erótico, y solo con frutas, que tiene mucho mérito, aunque ya sabemos que algunas frutas representan algo más.
    Un abrazo

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  10. Ahora entiendo el porqué de comer fruta, y el porqué a muchas las llaman la fruta de la pasión.
    Maravilloso racimo erotico y sensual.

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  11. original entrada la tuya, amiga. Me ahn encantado.
    Sludos cordialesy generosos

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